Leyenda Coreana

Una mujer joven llamada Yun Ok fue un día a la casa de un ermitaño de la montaña en busca de ayuda.

-OH, Sabio Famoso, ¡estoy desesperada! ‘Hazme una poción! -Se trata de mi marido – comenzó Yun Ok- Tengo un gran amor por él. Durante los últimos tres años ha estado peleando en la guerra. Ahora ha vuelto, casi no habla, a mi ni a nadie. No parece oír. A veces, cuando debería estar trabajando en el campo de arroz, lo veo sentado ociosamente en la cima de la montaña, mirando hacia la mar.

– Sí, así ocurre a veces cuando los jóvenes vuelven a su casa después de la guerra –dijo el ermitaño-, Puedo hacer tu poción. Pero el ingrediente principal es el bigote de un tigre vivo. Tráeme tu bigote y te daré lo que necesitas.

-¡El bigote de un tigre vivo!, exclamó Yun Ok-. ¿Cómo haré para conseguirlo? Continue reading